Todos disfrutamos de la comodidad del hogar, el que nacimos, el que conocemos, donde están nuestros seres queridos,
pero muchas veces para lograr la verdadera transformación es necesario arriesgar todo eso y mas.
hay que tener convicciones, valor y motivación para dar ese gran paso que nos hace caminar por la cornisa.
Pero nuestros hijos, nuestros jovenes y nosotros necesitamos que alguien lidere el camino de los cambios y eso se hace guardando los miedos en nuestro corazón y sacando valor y demostrando decisión.
Vale la pena intentar..
Nadie mejor que nosotros para defender nuestros sueños.